El documental "Exit through the gift
shop" plantea -o al menos a mí- varios interrogantes. Comencé a verlo
porque pensé que era un estudio del graffitero Banksy, pero a medida que
pasaban los minutos me di cuenta de que el "personaje" principal del
documental era Thierry Guetta, más conocido como Míster Brainwash.
La cinta muestra cómo este tipo comenzó grabando a artistas callejeros, aumentando su interés por esa corriente artística -sí, lo es, es ARTE-. Y finalmente es él mismo, incitado en cierta manera por Banksy, quien crea, de la nada, una representación de sus mejores obras -entendamos hasta aquí que hasta ese momento no tenía ninguna, por lo que ya empiezan a aparecer las preguntas- y se otorga el sobrenombre de "el Señor Lavacerebros".
La exposición es un éxito, a todo el mundo le encanta ver murales de Elvis con una ametralladora de Fisher Price entre las manos, botes enormes de spray decorados como una sopa Campbell, y un sin fín de objetos supuestamente revolucionarios. Y digo supuestamente...
¿Hasta qué punto este señor es creador de algo? Banksy revolucionó las calles y el arte creando un concepto nuevo de estética, crítica social y revolución. Incluso consiguió colarse en ciertos museos, y colocó obras suyas que fueron observadas como si de una obra más del museo se tratase (hasta que, claro, la seguridad advertía lo que había ocurrido)
Entonces, ¿quién es Thierry Guetta? ¿De la noche a la mañana se convirtió en artista? ¿Un artista nace o se hace... copiando? ¿Importa que haya sacado la esencia de Banksy y la haya explotado hasta convertirse en alguien capaz de darle a Madonna la portada de su último disco -sí, lo hizo-?
Mi opinión es clara. El arte también puede utilizarse como elemento de control y, por tanto, como algo tremendamente rentable. Lo importante de Thierry no es lo que vende, sino el hecho de por qué lo vende. Para mí, colocar una pistola de juguete en los brazos del rey del rock and roll no simboliza nada. Sólo una copia gastada de un concepto que no le pertenece y, por supuesto, que sabía de antemano cuántos billetes iba a producir.
Si explotamos la esencia del arte, si lo consideramos a él mismo como algo que se vende, el arte deja de tener sentido, pierde su libertad, y se encadena en ciertas respuestas sociales -exactamente iguales- que van perdiendo -y olvidando- su valor.
Thierry Guetta es un farsante más que ha conseguido, gracias al talento de otros como Banksy o Shepard Fairey, cubrir su cabeza de oro.
Por supuesto, hay que tener en cuenta que el documental está dirigido por Banksy, pero indudablemente da pie a millones de cuestiones...
La cinta muestra cómo este tipo comenzó grabando a artistas callejeros, aumentando su interés por esa corriente artística -sí, lo es, es ARTE-. Y finalmente es él mismo, incitado en cierta manera por Banksy, quien crea, de la nada, una representación de sus mejores obras -entendamos hasta aquí que hasta ese momento no tenía ninguna, por lo que ya empiezan a aparecer las preguntas- y se otorga el sobrenombre de "el Señor Lavacerebros".
La exposición es un éxito, a todo el mundo le encanta ver murales de Elvis con una ametralladora de Fisher Price entre las manos, botes enormes de spray decorados como una sopa Campbell, y un sin fín de objetos supuestamente revolucionarios. Y digo supuestamente...
¿Hasta qué punto este señor es creador de algo? Banksy revolucionó las calles y el arte creando un concepto nuevo de estética, crítica social y revolución. Incluso consiguió colarse en ciertos museos, y colocó obras suyas que fueron observadas como si de una obra más del museo se tratase (hasta que, claro, la seguridad advertía lo que había ocurrido)
Entonces, ¿quién es Thierry Guetta? ¿De la noche a la mañana se convirtió en artista? ¿Un artista nace o se hace... copiando? ¿Importa que haya sacado la esencia de Banksy y la haya explotado hasta convertirse en alguien capaz de darle a Madonna la portada de su último disco -sí, lo hizo-?
Mi opinión es clara. El arte también puede utilizarse como elemento de control y, por tanto, como algo tremendamente rentable. Lo importante de Thierry no es lo que vende, sino el hecho de por qué lo vende. Para mí, colocar una pistola de juguete en los brazos del rey del rock and roll no simboliza nada. Sólo una copia gastada de un concepto que no le pertenece y, por supuesto, que sabía de antemano cuántos billetes iba a producir.
Si explotamos la esencia del arte, si lo consideramos a él mismo como algo que se vende, el arte deja de tener sentido, pierde su libertad, y se encadena en ciertas respuestas sociales -exactamente iguales- que van perdiendo -y olvidando- su valor.
Thierry Guetta es un farsante más que ha conseguido, gracias al talento de otros como Banksy o Shepard Fairey, cubrir su cabeza de oro.
Por supuesto, hay que tener en cuenta que el documental está dirigido por Banksy, pero indudablemente da pie a millones de cuestiones...